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Description

"Una de las cosas más incomprensibles de los Estados Unidos es el
hecho de que, a pesar de su perfil esencialmente despreciable, todavía exista
aquí tanta belleza".
Amiri Baraka
He decidido titular a esta selección Soy Califa principalmente por el
entrañable y vigoroso himno Bebop de Dexter Gordon que, debo decir, también me
representa, pues nací y he vivido gran parte de mi vida en la ciudad que
colinda con California: Tijuana. La música que he elegido para este set tiene
por lo menos 40 años y debo a la influencia de mis padres el haber llegado a
ella.

La primera parte de este recorrido es un intento por homenajear la
innegable influencia que la música negra estadounidense, sobre todo la
experiencia “califa”, ha tenido en mi vida. Siempre me parecieron fascinantes
los movimientos en defensa de los derechos civiles que volcaron la historia de
Estados Unidos y que tienen la vigencia más absoluta. Sería imposible entender
la potencia del Black Lives Matter sin la herencia cultural del Black Power y,
en especial, la monumental aportación de la música a esta revolución cultural.
Menciono lo anterior porque, como acertadamente lo señala Amiri Baraka en su
icónica colección de ensayos Black Music, el jazz ha estado en el clóset de la
historia como una expresión restringida para los conocedores y los consumidores
snobs del “high-brow”, y no como lo que en realidad fue: la expresión más
subversiva contra la hegemonía cultural blanquizada del pop culture de la post
guerra. Así el bebop, más allá de un género musical, representa el primer
cataclismo cultural, con el que extraordinarios músicos como Charlie Parker,
Coleman Hawkins y Dizzy Gillespie enfrentaron el status quo.

La segunda parte que, aunque no empieza con Manteca de Chano Pozo, pero sí
con la versión de Mongo Santamaría, tiene su intersección con el encuentro del
jazz y la música afrocaribeña. Este segundo momento lo pensé desde el
sincretismo o encuentro entre el jazz y la música africana, rescatando la
riqueza que la religiosidad Yoruba y la tradición Lucumí han entregado a la
música, expresadas magníficamente en los cantos y tambores de Patato &
Totico
y en el bellísimo canto a Colombia de Eddie Palmieri.

VRTX, del colectivo Mujeres Vinileras, es selectora de twerkeo desbordado y
coleccionista incipiente de soul, funk, R&B, rap, trap, afrobeat, dub,
reguetón, dancehall y oldies but goodies. Le interesa sobre todo la música
hecha por mujeres brujas radicales del sur global, que enloquezcan las caderas
y rompan con la opresión corporal.