En julio de 1956 Chico O’Farrill reunió en La Habana a un impresionante all-stars para grabar el único album que registró para el sello Panart. Le obsesionaba la idea de llevar el ritmo que había sido creado por Enrique Jorrín para el formato de orquesta charanga, a una potente big-band, a través de impactantes arreglos suyos de clásicos del género, populares canciones y conocidos temas norteamericanos. El resultado de lo que aconteció en el famoso estudio de la calle San Miguel lo podrás escuchar de manera íntegra aquí, y también algunos otros temas que, fuera de este disco, resultaron cardinales en la obra y la discografía de Chico O’Farrill, uno de los músicos cubanos más trascendentes, por los aportes que su creatividad y cultura musical trajeron al jazz latino y a la música cubana.
Acompáñanos en este recorrido a ritmo de cha cha chá, aquí, en Desmemoriados. Historias de la Música Cubana.