En 1963, Mick Jagger y Keith Richards empezaron a componer para
su grupo y otros artistas. Eran unas canciones deliciosamente pop.
Forma parte de la leyenda: el día en que su manager y
productor, Andrew Loog Oldham, encierra a Mick Jagger y Keith Richards. No van
a salir, asegura, hasta que no saquen una canción propia, digna de ser editada.
Ellos preferirían seguir tocando blues afroamericanos pero Oldham intuye que
necesitan repertorio propio para competir con los Beatles y demás conjuntos del
momento. Y acertaba: les estaba enseñando el camino hacia la gloria.
A partir de ahí, difieren las
crónicas. Según Jagger, el primer tema que crearon fue It should be you. Pero
Richards insiste en que elaboraron algo
más adulto: la balada As time goes by,
que luego inmortalizaría Marianne Faithfull como As tears go by.
El programa de hoy se sumerge en el
cancionero más desconocido de los Rolling Stones de 1963-1964. Se trata de temas eminentemente pop que se
grabaron como maquetas –para otros artistas- o en tomas ya acabadas, que no se
editaron en su tiempo por diferentes razones. También hay alguna gamberrada
alcohólica, como Andrew’s blues, un tema pornográfico dedicado a su representante,
que se grabó con Gene Pitney, Phil Spector y ¿Graham Nash?
Lamentablemente, su etapa pop ha
quedado olvidada. Que conste que era compatible con su querencia por el blues,
que se reafirmó en sus visitas al estudio de Chess Records, en Chicago. Algunos
frutos de esas sesiones estadounidenses suenan al final del programa,
incluyendo una insólita aportación de Bill Wyman, Goodbye girl.
Advierto que la mayoría de los temas están sacados de
discos piratas, por lo que NO deben esperar alta fidelidad. Se trata, no
obstante, de un formidable cancionero que enriquece nuestra visión de los
primeros Rolling Stones.