El tema que estaremos tratando el día de hoy en Efesios 6:5-9, viene a ser el tema de una realidad espiritual en el hombre que tiene que ver con la esclavitud al pecado o ser esclavos de Cristo.
Simple y sencillamente la esclavitud ha existido virtualmente a través de toda la historia de la humanidad. Desde el momento mismo en que el hombre pecó, se constituyó en un esclavo, un esclavo del pecado. La constitución de un sistema de esclavitud en la sociedad viene a ser la manifestación externa de un problema interno en el hombre. Y lo que necesitamos entender es que las costumbres culturales no han permanecido estancadas a lo largo de los siglos, y las actitudes o formas hacia la esclavitud han cambiado junto con ellas.
Necesitamos aclarar que con tales tendencias el cristianismo no ha tenido nada en común. El Cristianismo vino no para abolir un sistema sino para transformarlo.
Presenta mandatos o mandamientos regulatorios al sistema, que lo transforman.
Es mi oración que este estudio abra nuestro entendimiento con relación al tema de la esclavitud y que por consiguiente nos haga más conscientes de nuestra responsabilidad en la sociedad.
Pastor Luis Portillo
