Se cuenta que una maestra entró cierto día a la clase y les dijo a sus estudiantes que se prepararan para un examen sorpresa. Todos se pusieron nerviosos, pero para su sorpresa no había preguntas en el examen, solo un punto negro en el centro de la hoja. Viendo la cara de sorpresa de sus estudiantes, la maestra les dijo: “Quiero que escriban qué es lo que ven en la hoja”. Los jóvenes, confundidos, obedecieron la extraña orden...