Todos hemos tenido días en los que nos apetece mandarlo todo a la mierd*. A veces es una señal de que sí debemos hacerlo, pero en muchos casos, nos podríamos hacer daño buscando una vida "mejor". En este episodio te doy mi opinión al respecto y te cuento cómo superar esos días en los que te apetece mandarlo todo a la mierd*