El sembrar
1) Ciudad: La gente busca a Jesús y Jesús sale a la búsqueda de la gente, no para tener multitud, porque Jesús no es populista, sino que sale porque sabe que puede cambiarles la vida. Por eso no te detengas en esta vida a buscar gente o estar siempre rodeado de gente, salí a mostrar lo que Dios hace en tu vida y el don que te regaló para que puedas mostrar que tu vida tiene un giro y un cambio que puede contagiar a los de tu alrededor. Lo más lindo de esto es que uno no sale a ofrecer sustentos, sino que uno muestra cómo es y lo que Dios en uno ha hecho. No te esfuerces por conquistar gente y vivir en multitudes o tener gran cantidad de seguidores, más bien detente a recordar que Dios ha puesto en vos grandes dones.
2) Borde: Tu misma vida genera límites y vos tenés que marcar límites con tu vida, porque no podés tenerlo todo y no podés hacer todo. Aprendí con mi vida que uno mismo tiene que regalarse el “no” y que hay cosas que hacemos para luego generar, pero que, antes de tirar la semilla, fíjate en qué terreno estás, puede que estés gastando tu vida en personas que no están dispuestas a sembrar algo con vos.
3) Brotar: Cada uno da de lo que tiene y de lo que puede, pero también es importante que veas qué quieres para vos y para tu gente, pues puede que constantemente te estés dando a todos y generando cosas ante gente que no lo quiere o no le interese. Por eso fíjate lo que vienes cosechando en estos últimos meses y fíjate realmente qué es lo que quieres. Algo bueno está por venir.