Jesús realiza su segundo milagro en Caná: cura a distancia al hijo de un funcionario real de Cafarnaún. Frente a una fe que exige signos, Él responde con palabra viva. El funcionario cree sin ver, y el milagro sucede.
Este episodio muestra cómo los signos de Jesús no buscan espectáculo, sino despertar la fe.
La curación llega a quien cree antes de ver. Un mensaje que interpela nuestras dudas, urgencias y confianza en Dios.