Es aceptarte tal como eres, en ninguna manera te compares con nadie. Lo que eres nadie puede superarlo. Si alguien te maltrata verbalmente, estás en el derechito de admitirlo o rechazarlo. Si admites el maltrato, no te amas. Debes de amarte tu primero antes de exigir amor a otro. El amor propio es congruente contigo mismo a partir de la forma en que te cuidas y te amas. ¡Saber que eres importante, valioso, saber el lugar que ocupas, es de valientes y tú lo eres! Pa’lante siempre.
