El Señor Jesús, que infunde su Espíritu en nosotros a través de la gracia, ESPERA de cada uno de nosotros que demos fruto bueno a través de las buenas obras. Cómo será posible eso, si muchas veces experimento que no puedo?
Dejando que el Señor obre y mire en y a atroces de nosotros! Por eso digámosle cada día: ¡Ven, Señor, Jesús!
Lecturas de hoy:
Gálatas 5, 22-23
Evangelio según san Mateo 3, 8-10
Preguntas para el examen de conciencia:
¿Estoy cosechando los frutos del Espíritu Santo? ¿soy más paciente, más benigno?
¿Creo que puedo tener una vida buena o mejor según mi voluntad? ¿Cómo sería mi vida dejando que el Señor siembre y coseche en mí?