Donde quiera que mires parece que el mal está ganando... ¡y sigue empeorando! En la Biblia, David lo sintió, Asaf lo sintió y Jacob también. Nos hace querer rendirnos... pero hay esperanza. El Salmo 13 da claves no sólo para aguantar un día más, sino para prosperar en cualquier circunstancia en la que nos encontremos.