EN ESTE EPISODIO ANDRES MALAMUD, LUIS PALMA CANE, MELCONIAN, CNN ECONOMIA, INFORME BLOOMBERG.
El nuevo ministro de Economía Sergio Massa afrontará desafíos urgentes. Antes de llegar al Palacio de Hacienda, ya dejó saber cuáles serán sus primeros pasos al frente del timón de la política económica del gobierno de Alberto Fernández. En ese horizonte más próximo aparecen como frentes más acuciantes la deuda en pesos, la relación con el FMI, la inflación, y la renegociación pendiente con el Club de París.
Massa dejará este martes de ser miembro de la Cámara de Diputados y comenzará así el proceso formal de desembarco en el Ministerio de Economía, que desde ahora concentrará algunas secretarías clave que anteriormente formaban parte de Desarrollo Productivo y del ministerio de Agricultura. El tigrense concentrará la botonera económica del Frente de Todos en casi todas sus variables.
En las últimas horas comenzó, aunque de manera lenta, la transición entre las viejas y las nuevas autoridades en el Palacio de Hacienda. Silvina Batakis y el resto del equipo, por lo pronto, continuaron en sus despachos de la sede del ministerio en contacto con los funcionarios que los reemplazarán. Lo mismo hicieron Daniel Scioli y los secretarios de la cartera productiva, oficinas que también tendrán caras nuevas.
El equipo de Sergio Massa ya cuenta con once nombres confirmados: Raúl Rigo (secretario de Hacienda), Claudia Balestrini (subsecretaria de Ingresos Públicos), Jorge Domper (subsecretario de Presupuesto), Eduardo Setti (secretario de Finanzas), Leandro Toriano (subsecretario de Financiamiento), Natalia Capurso (subsecretaria de Servicios Financieros), Celeste Izquierdo (directora de Análisis Financiero), Mercedes Marcó del Pont (secretaria de Asuntos Estratégicos), Leonardo Madcur (jefe de asesores), Daniel Marx (comité de mercado de capitales y deuda pública) y Lisandro Cleri (vicepresidente del Banco Central).
Deuda en pesos: se trata de un frente que presenta dificultades para el Palacio de Hacienda por la cantidad de vencimientos que debe afrontar la Secretaría de Finanzas en los próximos meses, sino también porque el mercado de deuda en moneda local es una de las pocas herramientas de financiamiento con las que cuenta el Gobierno.
Eduardo Setti, que seguirá como secretario tras llegar con Silvina Batakis, ya tuvo bajo su mando dos licitaciones de deuda en pesos. En los dos casos pudo terminar con saldo de financiamiento neto positivo, e incluso finalizó julio con unos $380.000 millones por encima de los vencimientos, lo que le permitió al Tesoro evitar pedir asistencia monetaria al Banco Central.
Para conseguirlo, Finanzas ofreció un pronunciado aumento en las tasas de interés de los instrumentos del Tesoro, que incluso llegaron a ser del 70% nominal anual, lo que el mercado tradujo como un interés efectivo de 90%, lo que está más en línea con las expectativas de inflación de algunas consultoras. El Banco Central también activó su propia suba de tasas.
Hacia adelante habrá una montaña de vencimientos a cubrir. A lo largo de las dos licitaciones de agosto tendrá que conseguir Finanzas al menos 612.000 millones de pesos, según Consultatio Financial Services. De todas formas, el mes más desafiante será septiembre, con vencimientos que orillan el billón de pesos, de los cuales aproximadamente la mitad está en manos de tenedores del sector privado y que en su enorme mayoría está indexada a la inflación