Así que el día de hoy, te animo a que sirvamos a Dios con entusiasmo, y si te preguntas como trabajamos para el Señor, te animo a que pienses que eres un representante de Dios en donde estas, así que todo lo que hagas, hazlo como para El señor y hazlo con alegría, sabiendo que todo lo que hacemos para él, no es inútil.