El pastel “Red Velvet” o “Terciopelo Rojo” se pierde en un remoto 1800 cuando a la masa se le agregaba cacao para lograr esa suave textura aterciopelada. El betabel daba el exótico y profundo colorante que le hace honor a su nombre, sin embargo, en ¡Tanto qué contar! tenemos una teoría macabra y trágica sobre el posible origen de este pastel que nos envuelve en su dulzura decadente. Atrévanse a escucharla…
Para esta particular y colorida receta utilizamos como ingrediente principal la música de:
Canzoni napoletane (medley); several composers, 958 min.
Serenata napulitana (strumentale), 3:18 min.
Producción: ¡TANTO QUÉ CONTAR!
Agradecemos a ARMIDA GONZÁLEZ REYES la información y la idea para esta noticia.