El famoso birote de Guadalajara nació de las hábiles manos de un sargento belga durante la Intervención Francesa. Su hechura tuvo como base la baguette, pero los ensayos, el echar a perder durante el laudado, el agua y el clima de la capital jalisciense le dieron sus características únicas y casi irrepetibles. Su creador se perdió en la bruma del anonimato, no su creación que hoy día es el fundamento de la torta ahogada.
Bon appetit y disfruten este crocante manjar con la música de:
Vals poético Felipe Villanueva (with score)
Intermezzo - Manuel Maria Ponce
Esta cápsula fue posible gracias a la sugerencia de MARTHA IRENE MÉNDEZ.
Mezcla de audio y música: EVA ALCÁNTAR.