De Nicanor Iturrino, Si el futbol puede funcionar como opio para las masas narcotizándolas y desviando su atención de los problemas reales de las personas y de la sociedad, también el cine puede ser un poderoso enajenador. Sin embargo gozamos de una película de Disney y Pixar que se convierte en una honrosa excepción, haciendo
ver que el cine en sí, lejos de ser una droga, es un maravilloso arte. Me refiero a la película "Intensa-MENTE" (Inside-Out en su idioma original), que muestra y demuestra cómo tanto la pantalla
como la cancha, pueden ser un espacio de auténtica diversión y de crecimiento personal....