Salmo 114:1-4 (Nueva Versión Internacional)
Cuando Israel, el pueblo de Jacob, salió de Egipto, de un pueblo extraño,
Judá se convirtió en el santuario de Dios; Israel llegó a ser su dominio.
Al ver esto, el mar huyó; el Jordán se volvió atrás.
Las montañas saltaron como carneros, los cerros saltaron como ovejas.