Listen

Description

Cuando comenzamos los últimos meses del año, es normal sentirse agotado o sin ánimos, por todos los retos que se han enfrentado, pero debemos confiar en Dios que el puede renovar nuestras fuerzas.

Base Bíblica:

Salmo 31:9-16 NVI

Tenme compasión, Señor, que estoy angustiado; el dolor debilita mis ojos, mi alma y mi cuerpo. La vida se me va en angustias y los años en lamentos; la aflicción está acabando con mis fuerzas y mis huesos se van debilitando. Por causa de todos mis enemigos, soy motivo de desprecio para mis vecinos; soy un espanto para mis amigos; de mí huyen los que me encuentran en la calle. Me han olvidado, como si hubiera muerto; soy como una vasija hecha pedazos. Son muchos a los que oigo murmurar: «Hay terror por todas partes». Se han confabulado contra mí y traman quitarme la vida. Pero yo, Señor, en ti confío, y digo: «Tú eres mi Dios». Mi vida entera está en tus manos; líbrame de mis enemigos y perseguidores. Haz resplandecer tu rostro sobre tu siervo; por tu gran amor, sálvame.

https://bible.com/bible/128/psa.31.9-16.NVI