Carta anónima - Locución Alejandro Fariza
#Cartasdesdemicasa
Querida persona desconocida, llevo días pensando en escribir esta carta, pero no sabía muy bien que decir y lo he ido posponiendo hasta hoy, acabamos de volver de aplaudir en el balcón como cada día a las ocho de la tarde sobre todo a esos valientes que tienes cerca de ti. Es un subidón de energía a pesar del frío que hacía hoy, ver como cada día los vecinos van saliendo a sus ventanas, como se miran unos a otros, como se resisten a irse cuando acaban minutos llenos de aplausos, como se quedan charlado con los vecinos, como se hacen señales con la linterna de los móviles o como algunos ponen música para poder olvidar un poquito esta situación, como cada vez sale más gente para demostrar ese cariño, para expresar ese gracias, para infundir esa fuerza, esa valentía, ese “lo vamos a conseguir, todo saldrá bien” Y hablado de personas valientes, sabes que eres una de ellas ¿no? No nos conocemos y por eso quizá no acertaré bien con las palabras, si es así espero puedas perdonarme, solo quiero decirte que luches, que no te rindas, que sigas siendo igual de fuerte como lo estás siendo ahora y como seguro lo has sido toda tu vida, porque vivir ya es un deporte de riesgo, toda una aventura. Y quedan aún muchas cosas que descubrir. Sé que es un momento muy complicado, muy duro, porque es ahora cuando te gustaría estar rodeado o rodeada de las personas a las que quieres, y justo eso es lo que nos ha arrebatado este virus, pero sólo lo ha hecho por un tiempo, porque volveremos a abrazarnos, a vernos en una terraza, a pasear por las calles de nuestras ciudades, a saltar en los charcos, a correr, a besar a nuestros abuelos y abuelas, volveremos a disfrutar de lo verdaderamente importante. Sólo tenemos que luchar un poquito más.
No sé si sabes que los niños han puesto en sus ventanas arcoíris con la frase de que todo va a salir bien, yo también las he puesto por casa a pesar de que no hay niños, igual que he puesto un cartel dando las gracias a tantos trabajadores que siguen trabajando por todos nosotros, esos y esas también son muy valientes. Te parecerá una tontería, y más compartirlo contigo pero el otro día estaba corriendo en la terraza de casa (ya sabes que estamos encerrados y algo hay que hacer...) y pasó una ambulancia y se me quedaron mirando, instintivamente levanté el brazo en señal de fuerza, de lucha… no sabes cómo lo levantaron ellos, con que fuerza lo hicieron varias veces, que valientes que son… ahí están en primera línea de batalla, dándolo todo, no sé si has visto las marcas que les dejan las mascarillas tras horas de batalla, un aplauso se les queda corto… después un trasportista se me quedó mirando, llevaba unos minutos observándole con su cabeza agachada, sus guantes, su mascarilla, su expresión triste… y se me ocurrió hacer lo mismo… volver a levantar mi puño al cielo con fuerza en señal de lucha… y el hombre no dudó en hacer lo mismo, le cambió la expresión del rostro y yo pensé con que poquito podemos hacer un poco más feliz el día de otra persona y con qué poquito podemos hacérnoslo a nosotros mismos, porque yo me sentí resultante de alegría.
Nunca te rindas, porque puedes con esto… ya estás un poquito más cerca de sentarte en un banco solo por el placer de disfrutar del sol en tu piel, un poco más cerca de esos abrazos que quitan cualquier mal. Tú puedes con esto, lo sé, no me cabe duda, nos vemos en las calles…