Nadie planea apostatar; la tibieza no es algo que agendamos. ¿Pero qué estamso haciendo intencionalmente para evitar la decadencia y prevenir la apostasía?
Una estrategia anti-apostasía no se improvisa, requiere constancia y perseverancia; aferrarnos día a día a la cruz de Cristo y depender de Su gracia, Su verdad y Su poder para avanzar en la carrera de la fe.
En este proceso, la doctrina es un recurso vital - no para debatir o alardear conocimiento, sino para alinear nuestra vida; fe y conducta, a la palabra de Dios.
He aquí cuatro doctrinas vitales para prevenir la apostasía:
{1} Cristo es el sacrificio perfecto
{2} Más santidad es más arrepentimiento
{3} No es ficticio ni el fuego ni el tormento
{4} El Espíritu Santo hace un trabajo completo
Por tanto, no durmamos como los demás, sino velemos y seamos sobrios.
(1Tes. 5:6)
