La frase "no soy perfecto" es usada por muchos para aminorar sus descuidos, para excusar su mal proceder o para minimizar su negligencia - pero para el cristiano, el "no soy perfecto" no debiera ser excusa sino motivación para la santificación. No soy perfecto, por eso persevero - no soy perfecto, por eso quiero cambiar - no soy perfecto, por eso me esfuerzo en madurar.
Devoción sincera, dependencia plena y sometimiento fiel a Cristo; son la clave del perfeccionamiento en Cristo - hablar de perfección cristiana es hablar de santificación, de madurez y de perseverancia; por eso debemos de buscar la perfección.
Sed, pues, vosotros perfectos, COMO VUESTRO PADRE que está en los cielos es perfecto. (Mat 5.48)
¿Por qué Jesús nos llama a ser “perfectos”? | ¿Cuáles son los tres aspectos de la perfección cristiana? | ¿Qué relación hay entre la perfección y la madurez cristiana? | ¿Cuál sería una forma inapropiada de usar la expresión “no soy perfecto? | ¿En qué sentido sí se vale decir “no soy perfecto”? | ¿Cómo influye nuestra relación con Dios en el proceso de perfección? | ¿Qué debemos concluir cuando alguien se dice cristiano, pero no está buscando activamente la perfección? | ¿De qué manera se evidencia la madurez cristiana o la ausencia de esta? | ¿Por qué habríamos de buscar la perfección si ya somos salvos por gracia? ¿No es esto caer en legalismo? | ¿Cómo la ley de Dios nos es de ayuda en el proceso de santificación?
DE ESTAS COSAS HABLAMOS EN ESTE EPISODIO...
