Quise traerles hoy un cuento de esos que nunca se olvida. De los que nos hacían leer el la escuela y que, con el correr de los años, uno empieza a valorar mucho más y se torna inevitable, al leerlo, cerrar los ojos y verse envuelto en ese blanco guardapolvo de la Escuela Normal de Bragado. Quiroga es sin dudas de los grandes autores que tiene la literatura por estos lares y abordar sus cuentos es una hermosa sensación.
Los dejo en compañía entonces de "La tortuga gigante".