PORQUE DORMIS?
Cuando Ciro estaba sitiando la ciudad, ofreció una recompensa especial al que descubriera la manera de atacarla. Cierto soldado cuyo nombre se recuerda, Hyereades, estaba observando un día y vio que se le caía el casco a un soldado de la guarnición sardita, y que bajaba a recogerlo entre las fortificaciones. Se fijó bien por dónde bajaba y subía. Aquella noche guió a una compañía por aquel sendero entre los riscos y, cuando llegaron a la ciudad, se la encontraron totalmente desguarnecida; así es que entraron y capturaron la ciudadela, que se consideraba tan a salvo que no necesitaba guarnición. La vida es un negocio arriesgado, y debemos estar siempre prevenidos.