En ocasiones nosotros los que formamos parte de él, su remanente, a menudo nos sientimos solos y pensamos será acaso que no hay nadie más que siga al señor. Recordemos que somos parte de su rebaño del cual Jesús dijo: "Mis ovejas oyen mi voz, y yo las conozco, y me siguen. " Es el Señor mismo quien nos pastorea, nos guÃa y nos "organiza".