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Marrulleros 

Acostumbrado a intentar quedar bien con Dios y con el Diablo, el regidor panista de Tijuana Arnulfo Guerrero León busca enriquecerse a costillas del pueblo. 

Seguro que el gobernador de Baja California Jaime Bonilla Valdez desconoce que, debido a las maniobras de este panista, se ha retrasado la transición de la Dirección de Transporte Municipal al nuevo Instituto de Movilidad Sustentable de Baja California. 

Sépase que Fufo Guerrero (así le dicen) representa los intereses de los empresarios Fernando Beltrán y Fernando Flores, quienes quieren que el alcalde de Tijuana Arturo González Cruz proponga al Cabildo de la Ciudad la entrega de un millonario subsidio mensual para su sistema de transporte. 

Para que quede más claro, Beltrán y Flores quieren que la autoridad pague a nombre de ellos, un crédito por más de 400 millones de pesos que deben al consorcio financiero Mifel. 

En su calidad de “enlace” entre los empresarios y el alcalde, el regidor Guerrero se frota las manos pues de concretarse este proyecto él se metería al menos 1 millón de pesos mensuales durante 20 años. 

Más allá de disfrazar el reparto ilegal del dinero entre los empresarios, lo más grave del asunto es que esta maniobra estorbaría la urgente transición de la regulación y operación del transporte público, especialmente la Ruta Troncal en el municipio de Tijuana. 

Mientras que los usuarios esperaban que el actual alcalde de Tijuana, el morenista Arturo González Cruz “destrabaría” los conflictos generados por el ex alcalde panista Juan Manuel Gastélum (el Patas), hoy se sabe que el regidor panista Arnulfo Guerrero León cumple el papel de “vínculo” en su provecho. 

Y aunque el regidor Guerrero tiene muchísimo colmillo para enredar a cualquiera, se supone que sus maniobras no servirían para manipular al alcalde Arturo González. 

En caso de apuntalar el millonario subsidio, este último impediría que el gobierno estatal asumiera el control total del transporte público. 

Dicho de otra manera, al responsabilizarse de pagar el subsidio, el gobierno municipal sería responsable de pagar esos 400 millones de pesos o la deuda tendría que asumirla el Estado. 

¡Gran enredo! 

El asunto de fondo es que un regidor panista (Arnulfo Guerrero), echa mano de la perversidad y sus habilidades para sacar provecho y de paso confrontar (aún más al alcalde de MORENA Arturo González y al gobernador (también de MORENA) Jaime Bonilla Valdez. 

Ah 

Por cierto, en los pasillos del Palacio Municipal retumba el rumor de un eventual desvío de recursos por 30 millones de pesos. 

¿Será el caso del exalcalde de Ensenada Gilberto Hirata Chico? 

¡No! 

Es otro peculado, solo que ahora en Tijuana.