Columna Cicuta del periodista Jaime Flores Martínez
Dolido
Resentido patológico por los incumplimientos derivados de su propio desquiciamiento, el ex vicerrector de la UABC Ángel Norzagaray comenzó a salpicar estiércol en busca de convertirse en candidato.
¡El objetivo es Bonilla!
Y es que Norzagaray dedica su tiempo en la elaboración y divulgación de videos donde brota su odio.
En los videos que distribuye entre sus amigos, este señor resalta que el gobernador Jaime Bonilla Valdez “no sabe gobernar y lo que le gusta es pelear”.
Burlón y aspirante a sarcástico, el doctor Norzagaray gesticula y con mirada extraviada llama “loco” a Bonilla.
¡Una pandemia de locura!
Cicuta no intenta defender al gobernador (él puede defenderse), sino destacar el obvio resentimiento de Norzagaray, quien fue marginado de la campaña proselitista del 2018.
Para información de la gente, este señor se desempeñaba como encargado de la comunicación de la campaña de Andrés Manuel López Obrador en Baja California por la presidencia de México.
Norzagaray presumió entonces de su amistad con César Yáñez, protagonista de una pomposísima boda a inicios de esta gestión.
Por aquellos días cacareaba entre sus incondicionales que sería candidato a la alcaldía de Mexicali.
Don Ángel cometió el error de apostar todo por César Yáñez quien salió del mapa político visible.
Jaime Bonilla asumió la gubernatura y se sacudió a Norzagaray, quien ahora encontró la coyuntura para ventilar su frustración.
Sépase que don Ángel es actualmente el encargado de cuidarle la imagen al ex rector Alejandro Mungaray Lagarda (¿cuál imagen?) y resguardar la reputación (¿cuál?) del ex gobernador panista José Guadalupe Osuna Millán, a quien —por cierto— Bonilla no le quita el guante de la cara.
En el video que alude Cicuta, el ex vicerrector Ángel Norzagaray se observa con la mirada distraída, alejada, trastornada.
