Que difícil es a veces dar gracias cuando las circunstancias son adversas pero cuando damos gracias por otros nuestra fe es extendida. Debemos siempre dar gracias a Dios por vosotros, hermanos como es digno, por cuanto vuestra fe va creciendo, y el amor de todos y cada uno de vosotros abunda para los demás. 2 Tesalonicenses 1:3