Isaías 3:15-23 nos recuerda la Santa ira de nuestro Dios. Dios es el que va a pedirnos cuantos a cada uno de nosotros, somos responsables de lo que hacemos y el Señor nos pedirá cuentas. Queremos vivir sin Dios, pensamos y vivimos independientemente de Dios, nos amamos demasiado a nosotros mismos. Recordemos que Dios merece toda honra y gloria, no somos nada ante Él, humillemonos y exaltemos su nombre.