Isaías 1:16-20 nos recuerda nuestro estado pecaminoso, necesitamos salvación, necesitamos perdón a nuestro pecado, necesitamos a Cristo, Él es el único que nos puede perdonar, sólo a través de Él es que podemos ser justificados y odiar el pecado. Busquemos el perdón en el sacrificio que Cristo hizo en la Cruz y disfrutemos de su gracia y bondad.