Es absolutamente necesario que no olvidemos que el Señor nos enseñó la estrategia fundamental para no salir derrotados cuando somos tentados. Con mucha claridad la Biblia nos enseña que cuando usemos las armas adecuadas siempre obtendremos la victoria. Pero es muy importante que sepamos que si no hay disciplina devocional de oración no puede haber victoria contra la tentación: Velad y orad, para que no entréis en tentación; el espíritu a la verdad está dispuesto, pero la carne es débil”.Marcos 10:34