La Biblia dice cuidadosamente: “…Acercaos a Dios y Dios se acercará a vosotros”. Santiago 4:8. Dios desea y aprecia que nos acerquemos a Él. Cuando Dios se nos acerca porque nos hemos acercado primero, suceden cosas como en la experiencia del profeta Isaías. (Cap.6:1-7).