Ambas estrellas del fútbol sudamericano se encontraron para formar un equipo con bastante poder futbolistico. Sin embargo, el ariete argentino de 21 años no estaba dulce con la red; y que mejor maestro que el polémico colombiano. Pues una charla fue antídoto suficiente para despejar la mente del flamante campeón con River en 1996, eso si, al estilo "tino" Asprilla.....