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En toda temporada hay un tiempo para “ver q sucedan las cosas” y un tiempo para “hacer que las cosa sucedan”. Hoy más que nunca debemos comprometernos con hacer nuestra parte, para que las cosas salgan a nuestro favor el día de mañana.

Evalúa: Debemos aprovechar este “stop” que nos está dando la vida para evaluar y analizar nuestro entorno, identificar eso que limita nuestra capacidad actual, revisar nuestro desempeño y compararlo con el potencial que tenemos, hacer los ajustes necesarios, establecer nuevos objetivos y enfocarnos en que se cumplan.

Ajusta: Sería una gran pérdida desaprovechar la oportunidad que hoy tenemos de reagruparnos, de ver dónde estamos, a dónde queremos llegar, qué barreras nos lo impiden, analizar todas las capacidades que tenemos y cuáles nos hacen falta, visionar en ese nuevo yo que quiero ser, definir un plan para lograrlo, conseguir las herramientas para cruzar ese camino, quitar de mi vida todo eso que me resta, me amarga, me roba la paz, me llena de intranquilidad, que trae inseguridad, comprometerme para vencer esos miedos que he cargado a todas partes, basta de vivir en piloto automático y ser ese que la necesidad me ha llevado a ser, es el mejor momento para alinearme con el propósito que Dios ha definido para mí, descubrirlo si aún no lo sé, y si ya lo tengo enfocarme en su cumplimiento, dejar la superficialidad en mi vida y empezar a navegar en aguas profundas contra vientos huracanados pero sabiendo q después de cada tormenta llega la calma y esa calma es la mejor de todas si navegábamos en el sentido correcto para cumplir mi propósito!

Estable: Basta de esperar q otros hagan por mi lo q yo debo hacer por mí mismo, es mi responsabilidad lo q vivo hoy, como lo vivo y como me preparo para el mañana, es relativamente fácil dejar q otros decidan por nosotros, q las circunstancias sean las q muevan los hilos de nuestro destino, permitir q la necesidad nos marque las acciones q tomaremos, ser llevados de aquí para allá como marionetas q no saben cuál será el próximo movimiento, estando expectantes para adaptarnos a lo nuevo q viene.