Lucas 4: 14-19 / Hechos 1:8
Jesús con el auxilio del Espíritu Santo venció al diablo cuando fue tentado con el poder, con el hambre, y sale victorioso!.
Avanza Jesús con el poder del Espíritu Santo.
Jesús declara su misión, "Yo he venido, he sido ungido por el Espíritu Santo, para anunciar buenas nuevas a ustedes, el Señor me ha enviado a darle libertad a los cautivos y oprimidos, a sanar a los quebrantados de corazón, a pregonar libertad a los cautivos, y vista a los ciegos, a predicar el año agradable del Señor."
En los capítulos posteriores vemos todas las enseñanzas y acciones que hizo hasta llegar a su muerte y resurrección. Jesús ofrece a sus discípulos al Espíritu Santo para ayudarles, para fortalecerles. Qué sería de la Iglesia sin el poder del Espíritu Santo? Él es el que sostiene a la iglesia de Dios.
En Hechos 1:8 El Señor promete a sus discípulos que recibirían poder cuando el Espíritu Santo viniera sobre ellos, y esa promesa también es para nosotros.
¿A quiénes les da el Señor al Espíritu Santo? A quienes le obedecen y le buscan, que oran, desde María, Zacarías, Ana, aquella mujer anciana que oraba en el templo, el apóstol Pablo, Pedro, muchos discípulos y apóstoles lo recibieron. Si oramos el Señor nos escucha y nos envía su poder.
Estas dispuesto a orar, estas dispuesto a buscar a Dios y obedecerle, estas dispuesto a buscarle en tus necesidades? Tenemos la llave para abrir las puertas!
Todo el que busca al Señor lo encuentra, y el que llama al Señor lo va a escuchar y el que le pide al Señor, recibe del Señor. Amén.