Lucas 3:15-20
Hay personas que tienen miedo a sufrir aunque todavía no están sufriendo, pero por el miedo de sufrir ya están sufriendo. El que tiene miedo a lo que le pueda ocurrir se paraliza, no avanza, fracasa y claudica. El profeta Juan avanza en su misión sin miedo de lo que vendrá.
En México hay periodistas que han trabajado sin miedo y varios de ellos han sido asesinados por hablar de los corruptos. Juan habla de igual forma, sin miedo, reprendiendo a Herodes, denunciando el pecado de Herodes y todas sus maldades. No tuvo miedo al cumplir la misión que tenía encargada, de llamar al pueblo a volverse a Dios y ser bautizados.
Quien abre la brecha tiene que ser fuerte y valiente, limpiar los obstáculos que encuentra en el camino. Juan preparó el camino del Señor Jesús, le abrió brecha. No tuvo miedo de sufrir la persecución de los poderosos. Cuando pensaban que Juan era el Cristo les aclaró que venía uno que los iba a bautizar con Espíritu Santo y Fuego.
Jesús reconoció la valentía y esfuerzo de Juan. Jesús sabía que se acercaba su tiempo para morir y avanzaba de aldea en aldea y otros le abrían brecha predicando a Cristo.
Calvino abrió brecha para que muchos creyeran en Dios y que las personas se arrepintieran. El Reino de Dios va avanzando contra viento y marea y los valientes y decididos forman parte de él.
El que pone su mano en el arado y mira hacia atrás no es digno del Reino de Dios. Cuando le seguimos Él está con nosotros. La muerte de Juan abrió camino a Jesús y ahora nos llama a predicar el evangelio a otros.
Seamos valientes y sigamos adelante, poniendo la mano en el arado sin mirar atrás!. Amén