Listen

Description

Juan 14:27

"La paz os dejo, mi paz os doy; yo no os la doy como el mundo la da. No se turbe vuestro corazón, ni tenga miedo."

Ser capaz de descansar serenamente en medio de la tormenta, así pintó la paz el predicador Billy Graham.

Muchos no han podido descansar debido a la pandemia, nuestras emociones se han alterado y la mayor que hemos tenido es el miedo, no hay quien no lo haya sentido ese peligro inminente.

El miedo es una respuesta adaptativa. ¿Cómo pasamos de relajación al miedo? cuando un estímulo del entorno llama la atención y genera estrés y éste curiosidad y si la curiosidad no es satisfecha genera miedo. Al sentir miedo se altera la presión, la respiración, la frecuencia cardiaca, la tensión muscular, el movimiento digestivo que no dependen de la voluntad del individuo. El miedo es indispensable para la supervivencia, nos avisa del peligro y da herramientas para protegernos. Sin miedo tendríamos pocas posibilidades de sobrevivir.

Cuando el miedo es excesivo, se convierte en un transtorno de ansiedad y angustia.

Tener miedo nos hace ser precavidos ahora en esta pandemia. Quien no tiene miedo y no toman precauciones no valoran su vida ni la de los demás.

Jesús también sintió miedo, ansiedad y angustia y sabe comprendernos cuando nos sentimos así. El nos ofrece su Espíritu Santo para que nos acompañe y consuele. El que me ama obedecerá mis palabras, la Paz os dejo, mi paz os doy, yo no os la doy como el mundo la da. No se turbe vuestro corazón, ni tenga miedo.

Permitir que el Espíritu controle la mente lleva a la vida y a la paz. La intensión de la carne es la muerte más la intención del Espíritu es vida y paz. Donde está la presencia de Dios hay paz.

¿Quién no quiere dormir tranquilo como el pájaro que está en la grieta mientras llueve? Amén