1a Pedro 2:13
El Señor nos da instrucciones muy precisas, somos hijos de Dios y formamos parte de la familia de Dios.
El Señor nos enseña a ser buenos ciudadanos, en las escuelas hay formación cívica y hemos aprendido a comportarnos como ciudadanos en una nación. Cuando pensamos en un ciudadano pensamos en una persona que procura el bienestar de los demás, que se conduce con respeto con otros, que no ofende a los demás, que no tiene tratos injustos con sus vecinos o con quienes tiene relaciones comerciales. Siempre esperamos que entre nosotros haya buenos ciudadanos y que seamos colaboradores.
México ha sido el cruce de centroamericanos hacia los estados unidos y también ellos necesitan ser respetados aunque no sean de esta nación, pero son seres humanos y tienen derechos humanos. Ser ciudadano nos da derechos en una nación.
Por causa del Señor someteos a toda institución humana….Deben someterse a las autoridades porque el Señor las ha puesto, quien se opone a la autoridad va en contra de lo que el Señor ha puesto.
Hemos de actuar haciendo el bien para que no haya queja y nadie se bule de nuestra fe ni nos señalen de conflictivos. La libertad que tenemos es para hacer el bien, siendo siervos de Dios, obedeciendo a las autoridades y darles a todos el debido respeto.
Cada grupo social busca el respeto y hemos de respetar a todos, aún teniendo una religión diferente. Hemos de dar a cada uno lo que le corresponde, ser solidarios para que conozcan el evangelio de Cristo siendo siervos de Dios. Amén