Salmo 55
Aumentó la violencia familiar como secuela de las medidas necesarias para esta pandemia, la casa se vuelve un lugar inseguro para quienes sufren violencia de sus familiares cercanos, seguro quisieran tener alas como la paloma y para volar y resguardarse en el desierto.
Este es el sufrimiento del rey David que observa la conspiración de su hijo Absalón quien quiere quedarse con el trono. Cuando el poder seduce a un hombre no hay escrúpulos que lo detengan. David está angustiado por la amenaza de su propio hijo y abandonado y traicionado por sus amigos.
El rey David recurrió al Señor y confía en su Dios y afirma: Yo clamaré a Dios, en la mañana tarde y noche y el Señor me salvará.
Entrégale tus preocupaciones al Señor y El cuidará de ti, no permitirá que los justos tropiecen y caigan. Confía en el Señor y él te escuchará. Entrega tus cargas y pon en sus manos toda preocupación, El te sustentará.
