Hechos 17: 16-33
Narra la leyenda que cayó una plaga o epidemia en la ciudad de Atenas que mató a cientos, por mas que los atenienses rogaban a sus dioses que las muertes cesaran, la epidemia seguía extendiéndose y matando la vida de los atenienses.
El altar que edificaron los atenienses le llamaron “al Dios no conocido” y Pablo anunció al Cristo resucitado entre los atenienses, que adoran a un Dios sin haberlo conocido, al Dios del cielo y de la tierra, que no vive en los templos.
Pablo cita a los poetas griegos y razona con los atenienses, siendo descendientes de Dios y presenta a Jesús como el Hijo de Dios para conocerle profunda y espiritualmente.
Entrega tu vida a Jesús y Él te mostrará su salvación. Amén
