Salmo 20
¡Estamos en guerra en todo el planeta! Hay microbios, como las bacterias y los virus que son perjudiciales para nuestra salud. Nuestro cuerpo tiene un sistema inmunitario que crea anticuerpos para defenderse de los microbios que pueden dañarlo aunque aveces no nos demos cuenta.
También hay una batalla espiritual en el mundo. El enemigo como león rugiente anda recorriendo la tierra buscando a quién devorar. Nosotros estamos en esta guerra espiritual, el botín de esta guerra es nuestra alma.
¿Quién vencerá en la batalla?
Una vez que el hombre está desalentado no hay mucho que hacer.
Las adversidades son las que ponen a prueba nuestra confianza en Dios. Cuando tenemos salud y nuestra familia está completa o cuando el dinero es suficiente para sostener nuestra vida no hace falta probar nuestra fe en Dios.
Al invocar el nombre de Jesús recibiremos la protección de Dios si le buscamos con fe, como fue el caso de el rey David.
El Señor espera que le ofrezcamos nuestra vida como sacrificio vivo, santo y agradable a Dios.
¡La victoria que vence al mundo es nuestra fe!
¡Los que confían en el Señor renovarán sus fuerzas, volarán como las águilas, correrán y no se fatigarán, caminarán y no se cansarán!
Pon tu confianza en Dios.