Listen

Description

Para la persona que no cree, no hay razón de vivir, no hay propósito, somos solamente chispas que cuando cerramos los ojos, desaparecemos. Pero para el creyente, no es así. Nuestra meta principal, es glorificar a Dios, adorarlo y lo más importante, llegar a conocerlo, porque al hacerlo sabemos de donde venimos y a donde vamos, podemos conocer la verdad y vivir conforme a ella sabiendo por qué estamos en esta tierra.