El miedo no tiene la última palabra en nuestrasvidas. Puede ser fuerte, pero nuestra confianza en Dios es aún más poderosa.
Hoy es el momento de identificar qué te está deteniendo y dar ese primer paso, sabiendo que no caminas solo. Como el atleta que decide correr aunque tenga dudas, tú también puedes avanzar. Recuerda: Dios ya te ha equipado con unespíritu de valentía y amor. Así que corre con fe, porque Dios va contigo en cada paso.