Antes de despertar, no suelo remolonear ni vacilar y pienso sólo en mi agenda para ese momento. Debo ir adonde tengo que ir y no me dejo dominar por mis estados de ánimo si tengo que hacer. Imaginen si todos nos quedáramos prendados por lo que la imaginación nos trae, así sea un momento de felicidad o de angustia. En estos tiempos donde dominan los torbellinos emocionales, la ducha tibia de la mañana nos quita todas las pesadumbres o estados perezosos de la cabeza. A veces pienso qué pasaría si me dejara llevar por esas vidas no vividas que imagino o por esas relaciones que no fueron ni serán que suelen sobrevenir en los momentos de quietud y reposo.
Lo que sí debe ser es la hora del desayuno, que es la comida más importante del día. Cada vez se sabe más los efectos nocivos del gluten en nuestra vida y muchas personas consumen harinas e hidratos de carbono como una forma de inyectarse de energía y agregarse enfermedades. Otros desayunan cereales y frutas que los activa de forma más sana. El desayuno puede ser también el momento más arriesgado del día porque ahí llega la pausa y la reflexión antes de empezar con las actividades del día.
Sin duda, madrugar nos renace, cierta humedad en el cielo, el silencio de las calles, los locales que aún no abrieron sus puertas, cierta inquietud por lo que se viene, parece que algo emerge que nos puede hacer reír o llorar. El desafío que tenemos cada uno al despertarnos es estar a la altura de nosotros mismos y aprender a perdonarnos cuando no nos percibimos tan bien.
Nos queda el otro que nos ayude a estar mejor, que nos devuelva un buen espejo de nosotros mismos, que valore y respete nuestras diferencias. Y con ese otro hablar de una forma que no sea sólo pasarse noticias. La escucha a lo que el otro me dice lleva a la unión y cuando callamos para escuchar, retiramos las palabras y abrimos ese espacio de espera y de lucimiento del otro. Cada vez que hablamos con alguien, estamos siendo generosos y de ese modo estamos queriendo al otro. #navidad #findeaño #regalos #crecimientopersonal #desarrollopersonal #relaciones