La práctica de esta técnica es útil cuando llegamos a un nivel de estrés, inquietud o miedo insoportable que nos desborda.
Aprende muy bien los paso para poder realizarlos después al máximo.
Paso 1: preparación
Ha de buscarse un lugar donde poder estar totalmente tranquilos sin que nada ni nadie nos moleste.
Es recomendable desenchufar los teléfonos y pedir silencio en la casa si la compartimos con alguien en ese momento.
Después ha de crearse un ambiente silencioso y con luz muy tenue. Vale la luz de las velas, o
dejar que entre un poquito de luz en la habitación.
A continuación, ha de escogerse una posición lo más cómoda posible: puede ser tumbado o sentado.
Elegiremos en aquella en que sabemos que no estaremos molestos. Cuidado si se escoge la posición tumbada porque uno podría dormirse enseguida, y ahora no buscamos eso.