La rectitud se expresa a sí misma en honestidad, justicia, simpatía y verdad. Se manifiesta en el hablar que es sabio, valioso, nutritivo y vivificante. Trae bendición a la nación. Diferentes dichos prometen que los justos mismos recibirán como recompensa liberación, bendición, satisfacción, realización, prosperidad, gozo, seguridad, dirección, plenitud de vida y favor con Dios y con otras personas.