Ve ante Jesús, preséntale tu vida y tus necesidades, y confía en Él. Escúchale decir: ¡Qué grande es tu fe!
El conocimiento de la fe es un don de Dios, que se revela a nosotros no como una cosa abstracta (…). La fe responde a una Persona que quiere entrar en una relación de amor profundo con nosotros y comprometer toda nuestra vida. Benedicto XVI