Como muchos, los Sodder llevaban una vida normal y tranquila en West Virginia. Disfrutaban el mes de diciembre como cualquier familia cristiana, pero eso se acabó en 1945 cuando una tragedia les llegó desprevenidamente en noche buena. Esta es su historia, un enigma que ha perdurado por 75 años. Ha traído mucha angustia a todos los involucrados y dejó manchada la navidad para los Sodder por siempre.