En este Viernes Santo, pareciera que la naturaleza toda se silencia ante la Cruz. La entrega de Jesús, adolorido, maltratado y moribundo, asume la Humanidad entera... es el Amor hasta las últimas consecuencias. Hoy estamos con Él para comprender nuestros dolores y los de todos, para sentirnos sanados y para compadecernos del sufrimiento de los hermanos. Hoy Jesús, en Amor extremado, nos sana y nos enseña a sanar a otros. Regálate 6 minutos de tu tiempo para acompañarlo en la Cruz y a la luz de su Palabra.