La esquina como postal del infinito: ese lugar simbólico que son muchísimos en los que cruzamos un umbral del misterio y en el que ocurren encuentros fortuitos o amenazas de peligros inminentes. La esquina como exploración de distintos paisajes urbanos que recorren la infancia a los viajes mientras el repentismo de una conversación nos hace abrir las fronteras de las historias.