En esta oportunidad hablaremos sobre el “Domingo de la Divina Misericordia”, que celebramos cada 2do domingo de Pascua desde el año 2000.
Fue el Papa San Juan Pablo II quien, el 30 de abril del año 2000 cuando canonizó a Santa Faustina, durante la ceremonia declaró que cada segundo domingo de Pascua se celebraría en toda la Iglesia el Domingo de la Divina Misericordia.
Años antes, en 1980, San Juan Pablo II había publicado su carta encíclica sobre la misericordia divina, en la que animaba a los fieles a regresar la mirada al misterio del amor misericordioso de Dios.
En 2002, el Pontífice estableció que el “Domingo de la Misericordia Divina” se enriquezca con indulgencias, con las que se pueden beneficiar también los enfermos, navegantes de altamar o aquellos que por causa justa no puedan abandonar su casa o desempeñen una actividad impostergable.